sábado, 9 de abril de 2016

Joaquín Balaguer

Poeta, político, abogado y ensayista, nació en Navarrete el 1 de septiembre de 1906.Fue seis veces presidente de la República Dominicana. Era hijo del puertorriqueño Joaquín Balaguer Lespier y la dominicana Carmen Celia Ricardo. Murió en Santo Domingo el 14 de julio de 2002.

Frases de Joaquín Balaguer:
  Un pueblo ignorante, es el mejor botín para un déspota.
Más, si se sirve de un frágil sistema democrático donde la corrupción se detenga en la puerta de su despacho.
·          La constitución es un pedazo de papel.
·          Si toca esa tecla, se hunde.
·          En qué quedamos se oye, o no se oye?
·          No tengo compromisos con nadie.
·          Yo sigo como la mala res.
·          No tengo compromisos con nadie.
·          Estoy ciego, sordo y mudo.
·          Este sonido triste y lúgubre…..el del caldero


Lemas de campaña 


¨·         Por sus frutos los conoceréis.
¨·          No lloren como mujeres lo que no supieron defender como hombres.
¨·         Adelante compatriotas a pasos de vencedores.
¨·          La suerte está echada.
¨·          Lo bueno no se cambia.
¨·          Y vuelve y vuelve Balaguer.
¨·          Cuatro años más y después hablamos.


Educación 



Durante los doces años del gobierno del doctor Joaquín Balaguer (1966-1978) se construyeron numerosas escuelas, hospitales, carreteras y muchos edificios importantes. En sus gobiernos los aportes a la educación fueron desproporcionales con relación a las grandes sumas de dinero del presupuesto nacional dedicados a las obras de la construcción, sobre todo de viviendas multifamiliares.

Esta fue una época de represión y autoritarismo. Muchas personas fueron desaparecidas y asesinadas. Algunos elementos que pueden caracterizar este régimen fue la austeridad, la persecución política, la censura a la prensa, persecución a los libros por asuntos ideológicos, deportación de los dominicanos, la muerte de miles de jóvenes por asuntos políticos, fraude electoral, construcciones de infraestructura, corrupción del estado, complaciente con los norteamericanos y en este caso, muy importante mencionar la falta de apoyo a la educación.

Se pusieron en práctica los más variados métodos de esterminios que historia alguna pueda registrar. A modo de ejemplo: ametrallamientos a escuelas, liceos y universidades, asesinatos de profesores y estudiantes, asesinatos de obreros, campesinos y profesionales. La represión en su gobierno podría ser igualada con la establecida en el régimen de Trujillo. Pero gracias a su auspicia mantuvo la represión en segundo plano en una sociedad con niveles de educación mínimo. Las escuelas y universidades eran manipuladas por el estado. Crecían en infraestructura, sin embargo inintencionadas en el desarrollo del intelecto.

Durante los doces años dictatoriales del gobierno, los salarios fueron congelados. A pesar de que en el sector privado paulatinamente aumentaron, el magisterio de escuelas públicas sufrió la pérdida de sus mejores profesores y lo mismo podría afirmarse de la enseñanza universitaria. Los mejores profesionales abandonaron el magisterio por falta de oportunidades para investigar y por los reducidos pagos a destajo, es decir, por horas de clases impartida, sin ningún tipo de seguridad laboral, seguro de salud o pensión.

La ley de educación que se promulgó en la década del 50 significó un hito en materia educativa, estuvo vigente por más de 40 años casi hasta la mitad de la década del 90, por lo que la educación estuvo enmarcada en el contexto de dicha ley. En su gobierno se registra las principales legislaciones:

Ordenanza 2-69 del 4 de marzo del 1969, que establece un nuevo plan de estudio para la educación media nacional.

Ordenanza 1-70, que procura el desarrollo integral del estudiante del nivel medio, dividiendo en dos ciclos, de cuatros y dos años en este nivel.


Ordenanzas 1-76 y 1-77, con el objetivo de aumentar la cobertura de la enseñanza primaria y mejorar la calidad de la educación, sobre todo en el ámbito rural.